Los rápidos deshielos están provocando crecidas considerables en los ríos de montaña

El próximo domingo, 19 de marzo, se abrirá la temporada truchera en la zona sur de Castilla y León, es decir, en las provincias de Ávila, Segovia, Salamanca y Valladolid. El resto de provincias habrá de esperar al día 2 de abril. Este adelanto en la zona sur se debe a la consideración de que en estas aguas el ciclo reproductivo de las truchas se adelanta de forma que para estas fechas ya ha eclosionado la hueva en los frezaderos y por tanto no se hace daño al pisar los fondos. En esta temporada la apertura en León coincide con las fechas previas a la Semana Santa, por lo que la afluencia del turismo que busca disfrutar con la pesca no se resentirá. En todo caso los aficionados se preguntan si no sería posible abrir los cotos intensivos para evitar así los largos desplazamientos a otras provincias. También la vecina comunidad gallega abre la veda mientras que en Asturias habrá que esperar una semana más.

A pesar de que las provincias de Avila y Segovia cuentan con tramos trucheros en los ríos Tormes, Alberche, Duratón, Eresma o Cega entre otros, los aficionados de León no acostumbran a solicitar cotos de pesca en estas provincias, próximas a la capital de España, cuyos pescadores invaden los cauces en estos primeros días. Si que suelen desplazarse a Galicia, donde resulta muy sencillo y barato conseguir cotos de pesca, especialmente en las provincias de Lugo y Orense. Los ríos gallegos, sin embargo, no son ajenos a la importante caída en las poblaciones trucheras que se viene produciendo en los últimos tiempos. Si el tiempo es soleado pescar en los ríos gallegos, de poco caudal y aguas cristalinas, resulta más difícil que en los días de lluvia.

Mejora la situación de los ríos

El adelanto de la primavera con temperaturas suaves, cuando no cálidas, está produciendo un importante deshielo que ha hecho crecer de forma considerable el caudal de los ríos que discurrían tan bajos como en pleno estiaje. Este caudal ha llegado a desbordar algunos cauces de montaña, especialmente en áreas donde la acumulación de nieve era notable, si bien se ha dejado sentir mucho menos en los ríos regulados pues la mayor parte del agua ha sido almacenada en los embalses que de esta forma están viendo aumentar sus reservas. En la comarca berciana ha llovido algo más, pero la escasez de neveros, unida a la sequía que se arrastraba desde Navidad, han reducido las crecidas situando los caudales en cotas habituales para esta época del año.

El incremento del caudal de los ríos a menos de dos semanas de la apertura de la temporada debe resultar claramente beneficioso para la pesca. Por una parte la corriente arrastrará buena parte de la contaminación y restos orgánicos acumulados en los cauces que, de esta forma, quedarán más limpios. También moverá los cantos rodados de los fondos, evitando la consolidación de lodos que «sueldan» las piedras evitando que se desarrolle bajo ellas la abundante microfauna que puebla los ríos leoneses y que constituye la principal fuente de alimentación de la trucha, si bien a corto plazo este alimento se reducirá al ser arrastrado. Al incrementarse los caudales las «pintonas» incrementarán su seguridad y serán menos vulnerables a los cormoranes. Cuando se abra la temporada la presencia masiva de aficionados en los ríos distorsionará los hábitos pescadores de los cuervos marinos, muchos de los cuales finalizarán su ciclo invernante retornando a sus hábitats marinos.